Empiezo por el 1, que es un poco t-uno.
Seguimos con el 2, al que le gusta leer novelas de Gal-dós.

Continuamos con el perezoso número 3, siempre tumbado en su tres-illo.
Ahora viene el número 4, tened cuidado... es un cuatr-ero.
¿Quién se atreve a desafiar al número 5 a una partida de cinqu-illo ?
¡Shhhhhhhh! No arméis mucho alboroto, vais a despertar al 6 de su seis-ta.
¡Jajaja! Que me mondo, con el número 7, que es un paya-siete.
Aparta de ahí número 8, no te comas los bizc-ochos.
El elegante y presumido 9, que hay que regalarle ropa para que se re-nueve.
Y a las 10... ¡En la cama estés!
¿Verdad que no somos tan aburridos? ¡Por cierto! Creo que no me he presentado. Soy 3'14, pero podéis llamarme π.
Pilar García 1ºF.